jueves, diciembre 19

Ansiedades y fragmentos de Neruda

Qué tienes? Yo te miro
y no hallo nada en ti sino dos ojos
como todos los ojos, una boca
perdida entre mil bocas que besé, más hermosas,
un cuerpo igual a los que resbalaron
bajo mi cuerpo sin dejar memoria.
Y qué vacía por el mundo ibas
como una jarra de color de trigo
sin aire, sin sonido, sin substancia!
Yo busqué en vano en ti
profundidad para mis brazos
que excavan, sin cesar, bajo la tierra:
bajo tu piel, bajo tus ojos
nada,
bajo tu doble pecho levantado
apenas
una corriente de orden cristalino
que no sabe por qué corre cantando.
Por qué, por qué, por qué,
amor mío, por qué?

No, nunca sentí amor

¿Se puede amar sin admirar?
Se puede dar un amor natural, común. Se puede sentir 
pena por una persona o atracción física hacia ella y enga­
ñarse pensando que esa reacción es amor. Pero para que 
exista el amor real es necesario admirar alguna cosa en él 
o en ella. Theodore Reik cree que el «amor sólo es posible 
cuando atribuyes un valor más alto al otro que a ti mismo, 
cuando ves en ella o en él una personalidad que, por lo 
menos en algún sentido, es superior a la tuya»

miércoles, diciembre 18

Pensamiento - Clarice Lispector



Ya escondí un amor por miedo de perderlo. Ya perdí un amor por esconderlo. Ya me aseguré en las manos de alguien por miedo. Ya he sentido tanto miedo, hasta el punto de no sentir mis manos. Ya expulsé a personas que amaba de mi vida, ya me arrepentí por eso. Ya pasé noches llorando hasta quedarme dormida. Ya me fui a dormir tan feliz, hasta el punto de no poder cerrar los ojos. Ya creí en amores perfectos, ya descubrí que ellos no existen. Ya amé a personas que me decepcionaron, ya decepcioné a personas que me amaron.

Ya pasé horas frente al espejo tratando de descubrir quién soy. Ya tuve tanta certeza de mí, hasta el punto de querer desaparecer. Ya mentí y me arrepentí después. Ya dije la verdad y también me arrepentí. Ya fingí no dar importancia a las personas que amaba, para más tarde llorar en silencio en un rincón. Ya sonreí llorando lágrimas de tristeza, ya lloré de tanto reír. Ya creí en personas que no valían la pena, ya dejé de creer en las que realmente valían. Ya tuve ataques de risa cuando no debía. Ya rompí platos, vasos y jarrones, de rabia. Ya extrañé mucho a alguien, pero nunca se lo dije.

Ya grité cuando debía callar, ya callé cuando debía gritar. Muchas veces dejé de decir lo que pienso para agradar a unos, otras veces hablé lo que no pensaba para molestar a otros. Ya fingí ser lo que no soy para agradar a unos, ya fingí ser lo que no soy para desagradar a otros. Ya conté chistes y más chistes sin gracia, sólo para ver a un amigo feliz. Ya inventé historias con finales felices para dar esperanza a quien la necesitaba. Ya soñé de más, hasta el punto de confundir la realidad. Ya tuve miedo de lo oscuro, hoy en lo oscuro me encuentro, me agacho, me quedo ahí.

Ya me caí muchas veces pensando que no me levantaría, ya me levanté muchas veces pensando que no me caería más.Ya llamé a quien no quería sólo para no llamar a quien realmente quería. Ya corrí detrás de un carro, por llevarse lejos a quien amaba. Ya he llamado a mi madre en el medio de la noche, huyendo de una pesadilla. Pero ella no apareció y fue una pesadilla peor todavía. Ya llamé a personas cercanas de "amigos" y descubrí que no lo eran... a algunas personas nunca necesité llamarlas de ninguna manera y siempre fueron y serán especiales para mí...

No me den fórmulas ciertas, porque no espero acertar siempre. No me muestren lo que esperan de mí porque voy a seguir mi corazón! No me hagan ser lo que no soy, no me inviten a ser igual, porque sinceramente soy diferente! No sé amar por la mitad, no sé vivir de mentira, no sé volar con los pies en la tierra. Soy siempre yo misma, pero con seguridad no seré la misma para siempre! 

Me gustan los venenos más lentos, las bebidas más amargas, las drogas más potentes, las ideas más insanas, los pensamientos más complejos, los sentimientos más fuertes. Tengo un apetito voraz y los delirios más locos. Pueden hasta empujarme de un risco y yo voy a decir: "Qué más da? Me encanta volar!"

viernes, mayo 24

Magias de la Maga



      -A mí me pareció que yo podía protegerte. No digas nada. En seguida me di cuenta de que no me necesitabas. Hacíamos el amor como dos músicos que se juntan para tocar sonatas.
      -Precioso, lo que decís
      -Era así, el piano iba por su lado y el violín por el suyo y de eso salía la sonata, pero ya ves, en el fondo no nos encontrábamos. Me di cuenta en seguida, Horacio, pero las sonatas eran tan hermosas.
      -Si, querida.

(Fragmento de Rayuela, capítulo 20)

miércoles, mayo 22

(A veces viene bien sublimar un poquito de esa inmensidad llamada bronca).



Que los ruidos te perforen los dientes, como una lima de dentista, y la memoria se te llene de herrumbre, de olores descompuestos y de palabras rotas.

Que te crezca, en cada uno de los poros, una pata de araña; que sólo puedas alimentarte de barajas usadas y que el sueño te reduzca, como una aplanadora, al espesor de tu retrato.

Que al salir a la calle, hasta los faroles te corran a patadas; que un fanatismo irresistible te obligue a prosternarte ante los tachos de basura y que todos los habitantes de la ciudad te confundan con un meadero.

Que cuando quieras decir: "Mi amor", digas "Pescado frito"; Que tus manos intenten estrangularte a cada rato, y que en vez de tirar el cigarrillo, seas tú el que se arroje en las salivaderas.

Que tu mujer te engañe hasta con los buzones; que al acostarse junto a ti se metamorfosee en sanguijuela, y que después de parir un cuervo, alumbre una llave inglesa.

Que tu familia se divierta en deformarte el esqueleto, para que los espejos, al mirarte, se suiciden de repugnancia; que tu único entretenimiento consista en instalarte en la sala de espera de los dentistas, disfrazado de cocodrilo, y que te enamores, tan locamente, de una caja de hierro, que no puedas dejar, ni un solo instante, de lamerle la cerradura.

Oliverio Girondo- Poema 21, Espantapájaros.
(

martes, abril 23

Las ciudades y el intercambio 2


En Cloe, gran ciudad, las personas que pasan por las calles no se conocen. Al verse imaginan mil cosas las unas de las otras, los encuentros que podrían ocurrir entre ellas, las conversaciones, las sorpresas, las caricias, los mordiscos. Pero nadie saluda a nadie, las miradas se cruzan un segundo y después huyen, husmean otras miradas, no se detienen.
Pasa una muchacha que hace girar una sombrilla apoyada en su hombro, y también un poco la redondez de las caderas. Pasa una mujer vestida de negro que representa todos los años que tiene, con ojos inquietos bajo el velo y los labios trémulos. Pasa un gigante tatuado; un hombre joven con el pelo blanco; una enana; dos mellizas vestidas de coral. Algo corre entre ellos, un intercambio de miradas como líneas que unen una figura a la otra y dibujan flechas, estrellas, triángulos, hasta que todas las combinaciones en un instante se agotan, y otros personajes entran en escena: un ciego con un guepardo sujeto con cadena, una cortesana con abanico de plumas de avestruz, un efebo, una mujer descomunal. Así, entre quienes por casualidad se juntan para guarecerse de la lluvia bajo un soportal, o se apiñan debajo del toldo del bazar, o se detienen a escuchar la banda en la plaza, se consuman encuentros, seducciones, copulaciones, orgías, sin cambiar una palabra, sin rozarse con un dedo, casi sin alzar los ojos. Una vibración lujuriosa mueve continuamente a Cloe, la más casta de las ciudades. Si hombres y mujeres empezaran a vivir sus efímeros sueños, cada fantasma se convertiría en una persona con quien comenzar una historia de persecuciones, de simulaciones, de malentendidos, de choques, de opresiones, y el carrusel de las fantasías se detendría.
 Fragmento de Las ciudades invisibles- Italo Calvino.

jueves, marzo 28

You know what? Reality and love are almost contradictory for me.

 It’s funny. Every single of my ex’s, they’re now married! Men go 

out with me, we break up, and then they get married! And later 

they call me to thank me for teaching them what love is, and, 

and that I taught them to care and respect women!… You know, 

I want to kill them! Why didn’t they ask me to marry them? I would 

have said “No,” but at least they could have asked!! But it’s my 

fault, I know it’s my fault, because I never felt it was the right man. 

Never! 

But what does it mean the right man? The love of your life? The 

concept is absurd. The idea that we can only be complete with 

another person is evil! Right?!…You know, I guess I’ve been heart-

broken too many times. And then I recovered. So now, you know,

 from the starts I make no effort because I know it’s not going to 

work out, I know it’s not going to work out.

viernes, marzo 15

Viejo

Las mejores ideas se me ocurren cuando no puedo anotarlas, pero así es mejor a veces. A veces al ponerlas en papel mueren un poquito, algo que parecía irreducible encuentra un límite forzado, artificial, que impide que se transmitan como uno hubiese querido. Jamás voy a escribir algo que me guste de igual forma que la idea en mi cabeza. Sólo tal vez muy enajenada, sólo tal vez a punto de dormirme, sólo tal vez con mucha práctica, sólo tal vez pensando al mismo tiempo que escribo. Admito que algunas veces, bastantes en realidad, dejo fluir mis pensamientos y en el mismo instante mis dedos se empiezan a mover y ya no hay nada más que pensar. Pero a veces me gana, mi mente va más rápido y me enredo y me trabo, porque quiero decirlo todo, y choco con la primera pared, con la primera simultaneidad.
En ese momento ya es menos auténtico supongo, ¿Cómo reproducir todo esto? Me digo, pero después vuelvo al principio (en algún momento se vuelve) y me convenzo a mí misma de que siempre algo va a quedar escondido, que así es mejor, que no quiero acabar con mis ideas, que prefiero dejar un vestigio para mí misma, un misterio que nadie pueda resolver.

lunes, enero 7

Simple

"Me paso la vida sin hacer nada útil, cultivando unos pocos amigos, admirando a unas pocas mujeres y levantando con eso un castillo de naipes que se me derrumba cada dos por tres. Plaf, todo al suelo. Pero recomienzo, sabe usted, recomienzo."

 Julio Cortázar.